El procedimiento es mínimamente invasivo y sólo requiere de anestesia local.
Los tiempos de recuperación se ven recortados.
Para los pacientes con pérdida ósea, y que por la razón que sea no pueden o quieren hacerse un injerto óseo, el Mini Implante es la solución más viable.
Si por razones médicas no puedes someterte a una intervención quirúrgica, los Mini Implantes Dentales son la mejor solución. La cicatrización de los Mini Implantes es mucho más rápida respecto al implante dental convencional.
Son fáciles de limpiar, un enjuague junto con un cepillado suave suele bastar.
Como los mini implantes dentales se usan de manera provisional, su extracción es rápida e indolora.
No suelen retener restos de alimento como otros métodos de anclaje, evitando el mal aliento.
El mini implante dental no suele ser viable a largo plazo debido al tamaño del implante (de 1,8 a 2,4mm de ancho y hasta 18mm de largo).
En el caso de que te quieras poner una prótesis removible, el mini implante dental no debería de usarse.
Sólo se usa en la parte inferior, ya que no se integra en la parte superior.
Dependiendo del caso, el dentista le propondrá uno u otro. Los Mini Implantes dentales no requieren casi cirugía, y no suponen una invasión agresiva para el hueso. Además, en el caso de tener pérdida ósea, el Mini Implante Dental no requiere casi nunca de un injerto. Es la solución más eficaz para estabilizar una prótesis inferior.
Si es para el reemplazo de una pieza dental de manera definitiva, el implante dental convencional es mucho más conveniente. Es menos económico, pero debido a su robustez, es más viable en el tiempo (la fatiga del titanio para el implante convencional es menor debido a su mayor grosor).
El dentista le dirá para su caso concreto cuál es la solución adecuada.